Por primera vez se restituye el Diván del Tamarit , una de las más intensas obras líricas de García Lorca, a los términos en que fue concebido y parcialmente impreso en 1936, con el prólogo escrito por Emilio García Gómez. La gran elegía Llanto por Ignacio Sánchez Mejías ha sido fijada a partir de la primera edición (1935) y de un autógrafo que conservó José María de Cossío. Incluye este volumen doce sonetos enmarcables en una de las series conocida bajo el título de Sonetos de amor oscuro