Lucho tiene catorce años y vive lejos de su patria, Chile. Ciertos acontecimientos políticos adversos obligaron a su familia a exiliarse en Berlín, Alemania. En la voz de Lucho que narra desde el humor y el desenfado sus aventuras por sobrevivir, Antonio Skármeta nos presenta un mundo de contrastes y paradojas en el que un joven debe construir su identidad.